¿Hacemos algo o dejamos que nos sigan robando, explotando
o lo que sea que hagan con nosotr@s?
Básicamente
somos mercancía a los ojos de quien quiere gobernar un país como si de una
empresa se tratase, pretendiendo hacer de él hasta una marca comercial incluso.
Este es, precisamente, el pilar sobre el que se fundamenta el informe “transforma España” en el que
se trata al país como una marca industrial con la clara intención de
potencializar su comercialización en el mercado mundial, anteponiendo los
beneficios de las empresas privadas a las necesidades de la población.
Este informe redactado por la
fundación Everis, en la que está a la cabeza Eduardo Serra Rexach, es
respaldado por muchas personas e instituciones, entre
ellas Juan Roig (Presidente de Mercadona) e incluso y tristemente para mí ya
que le tenía cierta estima hasta ese momento por su faceta divulgativa en el
programa "redes": Eduardo Punset.
Para mí esto es maquiavélico.
Enlace al informe:
Advierto que es un ladrillo, pero
después de leerlo, la parte en la que aparecen l@s que apoyan la idea es la mar
de “entretenida”.
Y ahora, después de aprobada la
ley “de protección ciudadana” que hasta ha sido criticada por la ONU debido a
las restricciones de las libertades civiles y despues de ser planteada por el ministro de
justicia la posibilidad de establecer una ley de censura para los medios
informativos que hagan alusión a los casos de corrupción y demás, se nos echa
encima el TTIP... (Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión) que va a poner, mas que nunca hasta ahora, el poder político en manos de las grandes multinacionales y los especuladores financieros y... ¿qué hacemos?
No se puede negar que la
presentación a las elecciones del partido "Podemos" ha mermado
considerablemente las capacidades del movimiento social en un momento crucial,
en el que hemos visto por ejemplo la aprobación de la ley "mordaza", también es cierto que
el inesperado resultado en las elecciones al parlamento europeo trajo consigo, debido al miedo de la principal fuerza política en el gobierno, la retirada (intuyo que momentánea) de la modificación de la ley del aborto y
la dimisión del puritanista ministro de justicia, Gallardón.
Pero ponernos un esparadrapo en
la boca y colgar la foto no resuelve gran cosa...¿verdad?
Esta merma de activismo social y
concretamente en este momento, creo que es trascendental, no olvidemos que
gracias a él se han conseguido cosas, aunque menos que las que hubiésemos querido,
como la paralización de parte de privatización de la sanidad pública madrileña por ejemplo,
otras no salieron adelante a pesar de los esfuerzos de much@s ciudadan@s, como la ILP contra los desahucios vinculados a las hipotecas, aun a
pesar del éxito de la campaña y que culminó
con un gran número de solicitudes oficiales presentadas, muy superior a la
requerida.
Por eso insisto en reivindicar
hoy tanto como siempre, o más que nunca, el movimiento social, que en mi
opinión debe de estar ahí independientemente de la política para hacer la
presión necesaria para que esta haga lo que tiene que hacer por l@s ciudadan@s y
no lo contrario.
